Antiguamente, cuando el/la odontólogo/a decidía hacer una prótesis dental, todos los esfuerzos iban encaminados a conseguir unos resultado excelentes, sobre todo, en la prótesis definitivas, sin prestar demasiada atención a las prótesis provisionales; sin embargo, hoy día, la tendencia de la odontología a cambiado, y cada vez son más los pacientes que nos exigen conseguir resultados excelentes (tanto estéticos como funcionales) desde el principio, sin importar si se trata de prótesis provisionales o definitivas. Gracias a los avances que se han producido en el sector en los últimos años, contamos con una cantidad de recursos ilimitados que nos permiten satisfaccer las expectativas de los pacientes desde el principio.
Las protesis provisionales son aquellas que están en la boca del paciente durante un tiempo limitado; y se suelen utilizar en la mayoría de los casos, para cubrir dos tipos de necesidades diferentes:
- Para suplir la prótesis definitiva durante el tiempo de fabricación de la misma por parte del prótesico (de esta manera, el paciente no se encontrará sin dientes en ningún momento)
- Para adaptar los tejidos blandos de la boca a la futura prótesis definitiva (ideal para pacientes periodontales que sufren de inflamación en las encías). En este caso, el periodo que una prótesis provisional puede estar en boca, suele ser mayor que en aquellos casos que se utiliza simplemente para suplir a la prótesis definitiva.
¿Cómo los podemos hacer?
A continuación os detallamos una forma fácil, simple y muy rápida de conseguir unas prótesis provisionales que cumplan las expectativas estéticas y funcionales de los pacientes:
- Toma de modelos de estudio digitales o en escayola: se realizarán modelos de estudios superiores e inferiores que nos permitirán simular la oclusión actual del paciente.
- Una vez tengamos los modelos de estudio, encargaremos al laboratorio realizar un encerado diagnóstico de las piezas implicadas y montaje en articulador para simular la mordida.
- Sobre dicho encerado diagnóstico, realizaremos una llave de silicona cuyo exceso se drene por la giba; la cual rellenaremos de una resina autopolimerilzable para posteriormente fabricar los provisionales.(es importante el exceso de giba; ya que la misma será la que nos permita adaptarno a las necesidades de la boca del paciente)
- Adecuación de los provisionales a los tejidos blandos que han sido modificados mediante hilos retractores.
- Colocación de los provisionales sobre los muñones previamente tratados y tallados.
- Por ultimo, pulido de los provisionales y retoque de los pequeños defectos.
En el caso de tener que realizar modificaciones para conseguir un ajuste perfecto, se recomienda volver a tomar medidas y mandar a laboratorio para hacer unos provisionales de laboratorio.
Dr. Francisco Acedo.